La instalación de placas fotovoltaicas sobre cubiertas industriales es una excelente manera de generar energía sostenible y reducir costes operativos. Sin embargo, este proceso comporta varios riesgos que hay que gestionar adecuadamente para asegurar una instalación segura y eficiente. Aquí se presentan algunos aspectos clave para una buena gestión del riesgo en este tipo de instalaciones.

1. Evaluación de la cubierta.

Antes de proceder con la instalación, es fundamental evaluar exhaustiva de la cubierta. Esta evaluación tiene que tener en cuenta el estado estructural de la cubierta, su capacidad para soportar el peso de las placas, y la identificación de posibles filtraciones o daños que puedan comprometer su integridad. Un informe técnico elaborado por profesionales calificados es esencial para asegurar que la cubierta puede soportar las placas y evitar sorpresas posteriores.

2. Normativa y permisos.

La instalación de placas fotovoltaicas está sujeta a normativa específica que varía según la ubicación. Es importante estar al caso de los requisitos legales, permisos y licencias que se necesitan para su instalación. Esto no solo asegura la conformidad legal, sino que también minimiza el riesgo de sanciones y paradas inesperadas en el proyecto.

3. Elección de materiales y tecnología.

La selección de materiales de calidad y la tecnología adecuada son cruciales para la durabilidad y eficacia de la instalación. Utilizar componentes de confianza, certificados y de alta eficiencia no solo mejora la rentabilidad, sino que también reduce el riesgo de averías y reparaciones costosas en el futuro.

4. Seguridad durante la instalación.

La seguridad de los trabajadores tiene que ser una prioridad durante todo el proceso de instalación. Esto implica proporcionar formación adecuada sobre las prácticas seguras de trabajo en altura y garantizar el uso de equipos de seguridad. También es importante evaluar los riesgos asociados a las condiciones meteorológicas y ajustar el calendario de instalación en consecuencia para evitar accidentes.

5. Mantenimiento y monitorización.

Una vez instaladas las placas, la gestión del riesgo no acaba. Es vital implementar un plan de mantenimiento regular para asegurar el buen funcionamiento del sistema y detectar cualquier problema potencial antes de que se convierta en una avería. Además, la monitorización continua de la producción energética ayudará a identificar anomalías y optimizar el rendimiento del sistema.

La instalación de placas fotovoltaicas sobre cubiertas industriales puede ser muy beneficiosa, pero requiere una gestión rigurosa del riesgo para garantizar su éxito. Evaluar las condiciones de la cubierta, cumplir con la normativa, seleccionar materiales de calidad, asegurar la seguridad durante la instalación y mantener un seguimiento adecuado son pasos cruciales para minimizar riesgos y maximizar los beneficios a largo plazo.