Continuamos con nuestras publicaciones especiales con motivo del Mes Europeo de la Ciberseguridad.

Si ya comentamos previamente la importancia de mantener nuestros equipo seguros y algunos consejos para evitarlos, en esta ocasión vamos a hablar de los tipos de ataques que tanto las empresas como los usuarios pueden sufrir.

Seguro que en alguna ocasión has oído hablar de los troyanos, pero ¿sabes qué son? Los Troyanos son programas que una vez instalados en nuestros dispositivos  permiten el acceso remoto por parte de hackers. Este tipo de ataques se utilizan para generar redes de equipos “zombi” que pueden utilizarse, por ejemplo, en el caso de los ataques de DoS.

Los ataques de DoS o de denegación de servicio, buscan generar un número tan alto de peticiones que no sea posible de soportar por nuestras infraestructuras. Es muy común por ejemplo, cuando el objetivo es “tumbar” un servidor y hacer que una servicio vía web no esté disponible a los usuarios.

El phising es uno de los ataques más comunes tanto a empresas como usuarios. A través de un email en la mayoría de los casos o una web que parece real y cuyo emisor parece ser un proveedor como nuestro banco u otros servicios contratados, nos solicitan que hagamos un inicio de sesión o que facilitemos nuestro usuario y contraseña. Una vez consiguen estos datos, podrán acceder a nuestra cuentas o solicitarnos un pago a cambio de recuperar el control.

Finalmente, los virus son uno de los más conocidos y afectan al funcionamiento básico de nuestros equipos, pudiendo provocar pérdida de datos o incluso el formateo completo del equipo al que afecten.